Frente a la Iglesia de San Juan y la Ermita, como triangulando el espacio nos encontramos este monumento. Sus partes parecen provenir de distintos tiempos.
Se alza sobre tres gradas cuadradas reutilizadas, donde podemos observar varias cazoletas. Sobre la base se alza una columna cilíndrica. Después del collarino, el capitel, como una prolongación de la columna, se presenta cilíndrico y decorado con volutas jónicas en sus cuatro lados.
La cruz es de sección cuadrada con aristas rebajada, y rematada con el letrero o titulus de INRI. Algunos cruceros erigidos ya a finales del Medievo tienen ya fuste cilíndrico, sobre graderío cuadrangular o circular.